lunes, 19 de noviembre de 2007

2 Minutes to Midnight

poco que agregar... con ustedes, Iron Maiden.


jueves, 15 de noviembre de 2007

Lo más notable del episodio del Rey vs Chávez

En la pasada Cumbre Iberoamericana, donde como al final de cada una se jura y se rejura que se lograron acuerdos maravillosos, muy concretos, que mejorarán el diario vivir de millones de personas a lo largo y ancho de Iberoamérica, y mostramos, como anfitriones, nuestras más bellas galas urbanas, sucedió un episodio notable, ya famoso y comentado en más de un foro: el impasse entre el Rey Juan Carlos de España y Hugo Chávez, Presidente de la República Bolivariana de Venezuela. Todos ya saben que el Rey le dijo airado a Chávez "¿Por qué no te callas?", de un solo golpe bajándole el perfil como autoridad y como persona, casi como regañando a un chiquillo malcriado. Lo que no ha sido el punto central de la noticia, y que a mi me parece es lo más importante de la noticia, no es un Monarca enojado rabiando contra un Presidente, ni la cara del último similar a la de un adolescente al que le cortan la rabieta de raíz. Lo notable es lo que dice José Luis Rodríguez Zapatero, el Presidente del Gobierno Español. Aclaremos, no tengo idea de cual es su editorial política base, cuál su trasfondo, cuál su postura frente a temas de la política más nuclear. Pero su argumentación y la elegancia, fuerza y maestría al exponerla me hacen creer nuevamente, aunque sólo un poco, en que la humanidad aún no está al borde de la extinción por idiotez. Todo empieza cuando Zapatero pide la palabra para comentar y reclamar por los insultos que Chávez profirió contra el ex presidente español José María Aznar. Tenga o no razón en el contenido de su perorata, Chávez se excedió, como gusta de hacer, olvidando, como adolescente irascible que es, dónde estaba parado. Vean por favor cómo se argumenta. Un Aplauso al Presidente Español. Se darán cuenta que el Rey da lo mismo en esta noticia, es realmente un factor secundario y baladí. Con ustedes, José Luis Rodríguez Zapatero




miércoles, 7 de noviembre de 2007

Asaltos, Ministros, Noticieros y Conmoción Pública


El asalto al banco Security, donde 4 (o 5) sujetos, en 40 segundos, se llevaron un botín millonario y, en la huida, asesinaron de un tiro a la cabeza a un carabinero, ha resultado ser el mejor caso de enciclopedia para ver cómo funcionan ciertas dinámicas mediáticas en nuestro querido país y, me atrevo a decir, en otros de la región, herederos todos de cajones de bananas, o tomates, o cualquiera fuese la exportación local. Resulta que la noticia, cinematográfica como pocas, y con el "condimento" de la muerte de un carabinero en servicio, ha llenado, al menos, 20 minutos de cada edición de cada noticiero de cada canal. No me cabe duda, también se ha gastado más plata en este caso que en muchos otros de características menos hollwoodenses y, por cierto, dudo que los Ministros y Plenipotenciarios de nuestra nación gasten tanta saliva, tanta idea fuerza y visitas protocolares en otros casos menos notorios. El caso es señalado como un caso de "alta repercusión pública", pero ese juicio, inmediatamente, inevitablemente, genera dos efectos concretos: se pondera excesivamente el caso en cuestión y se toma la injusta actitud de tomarlo como la única investigación policial en la cual los chilenos debemos involucrarnos activamente. El carabinero, muerto según las leyes y riesgos de su profesión, no es el único, sólo el más notorio. Se comprende que los medios de comunicación llenen sus minutos TV de la noticia, es un caso que rinde mucho, en rating, en opinión, en reacciones, mejor dicho. Lo que ya huele mal, es que los ministros se apersonen en funerales y responsos, dando categoría especial y de elite a ese muerto en desmedro de otros... lamentablemente uno comienza a sospechar que hay ciertas cosas que rinden mucho no sólo para los medios, sino también para autoridades y demases, que hacen un uso mediático y político de la conmoción pública, generada en parte por ellos mismos: siempre es noticia que un funcionario de alto rango se refiera a cualquier cosa, los medios siempre pondrán su ojo en ello, esa es su misión. Como sea, huele mal, porque ese uso es político, en último término. Y la Oposición, por supuesto, lo toma como un ejemplo más de tal o cual incompentencia, de que el país no es seguro y tanta cantaleta a la que nos tienen acostumbrados. Para mi la cosa es simple, dejen que el muerto descanse en paz, ya basta de repartirse los pedazos. Y dejen que la policía investigue el caso como corresponde, sin tanta foto, sin tanto micrófono.